martes, 27 de abril de 2010

Es un perro mundo...

Siempre lo ha sido.

¿Por qué? ¿Por qué hay necesidad de cuidarse de todo y de todos? Creemos que al no vivir más en cavernas hemos avanzado y en realidad seguimos repitiendo patrones de conducta: temiendo a lo desconocido, inventando dioses para confortarnos ante el destino, huyendo de los depredadores, atacando al más débil... Una buena diferencia es que ahora no necesitamos fieras animales, entre nosotros mismos las encontramos y nos acechan de niños, jóvenes, adultos o viejos, mujer u hombre, en cualquier confín terrestre.

¿Por qué es menester enfrentarse al contratiempo antes o después de vivir la fortuna? Decimos que aprender a sobrellevar ese destino es desarrollar un carácter, lo que aprendemos es a sobrevivir bajo esa circunstancia, como cualquier animal salvaje haría: adaptarse o morir. Incluso le dimos forma a toda un área del conocimiento llamada filosofía de vida que nos ayuda a aceptar de buen talante las dificultades y vislumbrar la recompensa más allá del conflicto inmediato.

Desafortunadamente nuestro mundo está lleno de desadaptados y... de fieras humanas...

Ojalá fuera fácil ser depredador, ojalá no hubieran inventado los principios para empezar. Supongo que entonces aquí sería un caos y no un mundo habitable. ¿Mas vale que haya equilibrio entre débiles y fuertes no? Como en la vida salvaje, al natural.

Dizque civilizados pero representando los mismos papeles, sólo, tecnologizados.

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